Vitamina C para el rostro. Todo el mundo sabe que la vitamina C, o ácido ascórbico, refuerza el sistema inmunitario y favorece la salud en general. Pero la vitamina C también es un verdadero primer auxilio para la belleza de la piel y el cabello.
Una carencia grave puede provocar el adelgazamiento de los rizos, la inflamación del rostro y el envejecimiento prematuro.
Lo que debe saber sobre la vitamina C para el rostro
La Vitamina C para el rostro es un potente antioxidante que neutraliza activamente los radicales libres.
También acelera la regeneración de los tejidos al estimular la producción de fibras de colágeno, que mantienen la elasticidad de la piel.
Otra virtud importante de la vitamina C es que protege la piel de los rayos UV, especialmente los del espectro A, que no provocan quemaduras, sino que rompen las fibras de la piel, cambios imperceptibles que conducen a la formación de arrugas en el futuro.
Cuando el organismo carece de ácido ascórbico, toda la renovación de los tejidos se ralentiza, la cicatrización de las heridas se hace más lenta, la piel y el esmalte dental se adelgazan y las paredes de los vasos sanguíneos se vuelven frágiles.
La Vitamina C para el rostro u otras zonas no se sintetiza en el organismo, por lo que es importante compensar su carencia mediante una dieta adecuada, así como tomando complejos vitamínicos tras consultar con su médico.
Los productos que contienen Vitamina C para el rostro también pueden utilizarse para complementar los cuidados de belleza cotidianos.
La vitamina C en el cuidado facial
La mejor época para utilizar cosméticos enriquecidos con vitamina C es en otoño, invierno y primavera. Durante estos periodos, debido a los constantes cambios climáticos y otros factores negativos, la piel suele sufrir sequedad y tener un aspecto apagado y cansado. El cuidado con vitamina C ayudará a mejorar los procesos metabólicos en las células de la piel, igualará el tono de la piel, restaurará la frescura y la luminosidad de la piel.
La Vitamina C para el rostro está presente en los productos de exfoliación de la piel, las máscaras faciales, los sueros y las cremas, todos ellos conocidos por sus efectos antioxidantes, que ayudan a combatir el envejecimiento prematuro e incluso a reparar las células dañadas de la piel.
La vitamina C también mantiene la piel hidratada, evita la pérdida de humedad, regula los niveles de PH y mejora la inmunidad celular.
Además, el ácido ascórbico aclara y unifica la tez, y también es eficaz para tratar las marcas, la inflamación y la irritación posteriores al acné.
Para uso doméstico, los esteticistas recomiendan optar por productos con una concentración de vitamina C del 5-10% al 20%. Para evitar la irritación de la piel, se recomienda aumentar la concentración gradualmente. Las personas que tienen la piel sensible deben utilizar los productos con vitamina C con precaución: pueden producirse picores, enrojecimientos y hormigueos debido a la utilidad del ácido; por lo tanto, hay que elegir primero productos con un bajo contenido en vitamina C.
Se recomienda aplicar el tratamiento de vitamina C por la noche, antes de acostarse, y asegurarse de utilizar una crema protectora con factor SPF por la mañana para evitar la aparición de pigmentación, ya que tiene un pronunciado efecto blanqueador e iluminador.
Después de lavar y tonificar, aplique la crema o unas gotas de sérum de vitamina C y espere unos 10-15 minutos para que se absorba y no interfiera con otros tratamientos. Ahora puedes aplicar los demás productos cosméticos necesarios.
Usos caseros de la vitamina C
Además de estimular la producción de colágeno, la vitamina C también ayuda a combatir todos los signos del fotoenvejecimiento: engrosamiento de la piel, desniveles, manchas de la edad.
Las manchas oscuras en la piel son un signo de los cambios relacionados con la edad.
Añadir una pequeña cantidad de vitamina C natural a tus productos de belleza cotidianos puede ayudar a remediar la situación.
Una pizca de ácido ascórbico en polvo será suficiente para prevenir la pigmentación, reducir las manchas oscuras existentes y promover un aspecto más juvenil de la piel.
Para obtener un brillo instantáneo, los esteticistas recomiendan aplicar una ampolla de vitamina C líquida en el rostro a modo de mascarilla: extenderla suavemente sobre la piel limpia, evitando el contorno de los ojos y los labios, mantenerla entre 5 y 10 minutos, según la sensibilidad de la piel, y aclarar con agua. A continuación, puede continuar con su rutina habitual de cuidado de la piel.
La vitamina C deja el rostro con una hermosa tez, las manchas oscuras e incluso las pecas son menos visibles, los poros se minimizan y las líneas finas y las arrugas se suavizan: la piel parece más firme y relajada. La vitamina C también tiene un efecto suavizante sobre la piel, por lo que el uso regular de productos con ácido ascórbico dará como resultado una piel suave y flexible.
Todo el mundo sabe que la vitamina C, o ácido ascórbico, refuerza el sistema inmunitario y favorece la salud en general. Pero la vitamina C también es un verdadero primer auxilio para la belleza de la piel y el cabello. Una carencia grave puede provocar el adelgazamiento de los rizos, la inflamación del rostro y el envejecimiento prematuro.
Suscríbete a nuestro blog.
La guía definitiva para el cuidado de la piel durante el verano y cómo puede ayudarlo a verse y sentirse mejor
Leer Más
El uso del óxido de zinc en cosmética.
Leer Más
Vitamina C para el rostro: cuál es su secreto y quién la necesita
Leer Más
Beneficios y contraindicaciones peelings químicos
Leer Más
Ácido hialurónico. Eficacia para la piel del rostro
Leer Más
Celulitis en las rodillas: ¿Por qué es tan común?
Leer Más
¿Cuál es la diferencia entre la celulitis y la piel de naranja?
Leer Más
3 Tips para combatir la piel de naranja en las piernas.
Leer Más
4 maneras cuidar nuestros pies en verano.
Leer Más